El 21 de julio de 2015, a petición propia, una representación de la ONC ha sido recibida en el Ministerio de Agricultura para tratar la problemática existente, a nivel nacional, en materia de transporte de perros de caza y, en especial, en relación con la dispersión legislativa e interpretación de la normativa del transporte de rehalas. Asistieron a la reunión en la sede del Ministerio por parte de la ONC, Luis F. Villanueva, Presidente de Aproca, Felipe Vegué en representación de Arrecal y Alfonso Aguado, Presidente de la Asociación Española de Rehalas. Por parte del Ministerio nos recibieron Lucio Carbajo, Subdirector General de Sanidad e Higiene Animal y Carmen Martín, responsable de movimiento intracomunitario.

En el transcurso de la reunión los representantes de la ONC expusieron la situación de incertidumbre que existe en el colectivo de cazadores en general, y de rehaleros en especial, por la diversidad de interpretaciones que se hace de su modalidad cinegética por parte de las diversas autoridades competentes en materia de transporte de animales. Se señala el principal problema en la consideración de la caza en general y la caza con rehala en especial, como actividad económica sin que exista un fundamento legal ni de hecho para ello, máxime cuando los criterios interpretativos del Ministerio de Trabajo y la definición expresa de la legislación cinegética la clasifica como una actividad deportiva y de ocio.

En consecuencia, se solicita por parte de la ONC que el encuadramiento legal del transporte de los perros de caza se haga en base a sus condiciones específicas, estableciendo su regulación en base al criterio de proporcionalidad del riesgo sanitario y atendiendo al adecuado estado sanitario y bienestar de los animales en el transporte, objetivos comunes con los de los miembros de la ONC y del sector de la caza. Por el contrario, se requiere al MAGRAMA para que, a la mayor brevedad, unifique los criterios interpretativos por parte de las CCAA eliminando la consideración de la caza, y en especial de la caza con rehala, como actividad económica y al cazador como transportista profesional, por ser contraria a una realidad social ampliamente contrastada.

Los representantes del Ministerio, en un ambiente de cordialidad y colaboración, han tomado nota de las propuestas del sector cinegético y se han comprometido a realizar las gestiones oportunas con las CCAA para clarificar el encuadramiento legal del transporte de perros de caza en nuestro país a fin de que la aplicación de la legislación siga unos criterios uniformes y lógicos, en base a parámetros sanitarios y de bienestar animal, a lo que los representantes de la ONC se han ofrecido para cooperar en un clima de entendimiento mutuo.